El partido comenzó de manera muy igualada entre dos equipos que demostraron estar enchufados en los primeros compases del partido. Por parte catalana quién tiraba de las riendas del equipo en ataque era Miki Feliu, pero en dos acciones inesperadas el conjunto alicantino supo sacar provecho y provocó dos faltas personales a Bandoumel, el cuál tuvo que marcharse al banquillo. Entonces fue ahí cuándo de la mano de un enchufado Taylor Coppenrath (estaba siendo muy superior), el Lucentum Alicante abría una importante diferencia de +8 puntos a falta de poco más de tres minutos para la conclusión del primer período. Con el Lucentum dominando claramente y en los últimos segundos del período ocurría un "contratiempo" para los de Rubén Perelló, su líder Taylor Coppenrath abandonaba la pista con 8 puntos y 3 rebotes en 9 minutos tras haber cometido dos faltas personales, el resultado al termino de los diez primeros minutos del partido era el de 13-22 favorable al Lucentum Alicante.
Un enchufado Pierre Oriola era quién tiraba del carro del Força Lleida en los primeros instantes del segundo cuarto de partido. El jugador del Assignia Manresa que está jugando (en cualidad de cedido) en Lleida, estaba dominando en la pintura ante dos jugadores míticos como Darryl Middleton y Guillermo Rejón, los cuáles formaban la pareja interior del Lucentum en este arranque de segundo período. Los lucentinos gracias a jugadas individuales de sus interiores continuaron dominando durante todo el segundo período, aunque Perelló se vio tan apurado que con dos faltas y a falta de tres minutos introdujo en pista a Coppenrath, al cuál intentaban cargar una tercera falta personal los locales, Bandoumel (Foça Lleida) minutos antes salió y cometió una estúpida tercera falta personal. El resultado con el que nos fuimos al descanso era el de 34-38 para los alicantinos.
El tercer período fue otro gran periodo de un conjunto catalán que seguía estando cerca del Lucentum Alicante pero seguía sin poder ponerse por delante debido a la efectividad en el 1x1 de los jugadores exteriores del equipo que dirige Rubén Perelló. Una tercera falta personal de Taylor Coppenrath obligaba a su técnico a sustituirle y de nuevo y como en la primera parte era el joven Pierre Oriola quién se hacía amo y señor en la pintura, con 17 puntos a falta de un minuto para que finalizase el tercer período del partido los catalanes estaban a solamente tres puntos de los alicantinos, cuyo equipo seguía por delante en el marcador en gran parte gracias al talentoso Álex Llorca que no estaba decepcionando para nada en el día de hoy.
Sergi Pino era ahora quién mediante jugadas individualidades intentaba poner a los suyos (Força Lleida) por delante en el luminoso, pero los catalanes siempre estaban cerca, pero no, no podían superar a un Lucentum que cuándo más necesitaba una canasta aparecía un exterior para anotar desde más allá de la línea del 6'75. Así resultó imposible al conjunto catalán ganar el partido, que peleó durante todo el encuentro pero que finalmente se quedó sin un premio que quizás merecieron. Coppenrath y Llorca fueron los mejores del Lucentum, mientras que el joven Pierre Oriola fue el mejor del Força Lleida, equipo que sigue peleando cada partido pese a los duros momientos que atraviesa el club económicamente.
El tercer período fue otro gran periodo de un conjunto catalán que seguía estando cerca del Lucentum Alicante pero seguía sin poder ponerse por delante debido a la efectividad en el 1x1 de los jugadores exteriores del equipo que dirige Rubén Perelló. Una tercera falta personal de Taylor Coppenrath obligaba a su técnico a sustituirle y de nuevo y como en la primera parte era el joven Pierre Oriola quién se hacía amo y señor en la pintura, con 17 puntos a falta de un minuto para que finalizase el tercer período del partido los catalanes estaban a solamente tres puntos de los alicantinos, cuyo equipo seguía por delante en el marcador en gran parte gracias al talentoso Álex Llorca que no estaba decepcionando para nada en el día de hoy.
Sergi Pino era ahora quién mediante jugadas individualidades intentaba poner a los suyos (Força Lleida) por delante en el luminoso, pero los catalanes siempre estaban cerca, pero no, no podían superar a un Lucentum que cuándo más necesitaba una canasta aparecía un exterior para anotar desde más allá de la línea del 6'75. Así resultó imposible al conjunto catalán ganar el partido, que peleó durante todo el encuentro pero que finalmente se quedó sin un premio que quizás merecieron. Coppenrath y Llorca fueron los mejores del Lucentum, mientras que el joven Pierre Oriola fue el mejor del Força Lleida, equipo que sigue peleando cada partido pese a los duros momientos que atraviesa el club económicamente.
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