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domingo, 13 de mayo de 2012

La temporada regular del Madrid.

 El Real Madrid ha finalizado la temporada regular situado en la segunda posición de la tabla clasificatoria, por detrás del Barcelona, lo que permitirá a los blancos contar con factor cancha en el playoff durante las dos primeras eliminatorias, como mínimo. Los hombres de Laso se cruzarán con el Banca Cívica en los cuartos de final, equipo al que se han enfrentado en tres ocasiones esta temporada y al que han conseguido ganar en cada una de ellas. Vamos a hacer un repaso general a lo que ha dado de si esta temporada regular para un equipo que, a estas alturas de la competición, ya cuenta con un título en su casillero, la Copa del Rey, y que aspira a poder lograr ganar una liga que no será nada fácil de conseguir. Como es de esperar, el Madrid ha hecho muchas cosas bien, mejorando las realizadas durante temporadas anteriores, aunque también quedan aspectos a mejorar, algunos relacionados con determinados jugadores que han rendido por debajo de lo esperado. Comencemos recordando la trayectoria del equipo en cuanto a resultados en la liga.

La temporada comenzó bien para el equipo madridista, con unas primeras jornadas prometedoras, a pesar de caer en el segundo partido de liga ante el Bilbao, su bestia negra. El Madrid cosechaba buenos resultados, con victorias contundentes ante equipos de nivel como Gran Canaria, Unicaja, Fuenlabrada o Valencia. El equipo contaba en sus filas con dos jugadores que aportaban un salto de calidad importante, como eran Rudy Fernández y Serge Ibaka. Por momentos, el Madrid gustaba y mucho con su estilo de juego, ya que Laso estaba logrando hacer jugar al equipo de una forma muy vistosa para los aficionados, mediante un baloncesto rápido y efectivo. Jugadores como Sergio Rodríguez daban un paso al frente en la aportación al equipo con respecto al año anterior, y otros como Begic se hacían notar en la rotación. Explotaba también Mirotic, que poco a poco se iba convirtiendo en la pieza clave del juego ofensivo, haciéndose con un puesto de titular indiscutible en el quinteto del equipo. Tras la victoria ante el Valencia, Rudy e Ibaka regresaban a la NBA, y el Madrid notaba su ausencia durante las siguientes jornadas, perdiendo dos partidos ante el Estudiantes y el Joventut, dejando claro que la aportación de ambos había sido fundamental. A pesar de ello, los de Laso empezaron a reponerse rápido, gracias también a la llegada de Singler, que poco a poco se ganó la confianza de su entrenador demostrando que podía aportar muchas cosas al equipo en la posición de tres. El Madrid conseguía ganar los cuatro partidos siguientes, cerrando la primera vuelta con un buen balance de victorias y derrotas, y logrando además vencer al Barcelona y al Caja Laboral en el Palacio de los Deportes.

La segunda vuelta comenzó con otra victoria, pero de nuevo el Bilbao logró imponerse al Madrid, haciendo que los merengues volviesen a mostrar ciertas dudas en cuanto a su capacidad ante rivales peligrosos. El Madrid llegó a la Copa generando dichas dudas, y fue allí donde las disipó todas, haciendo tres partidos muy serios, especialmente el de la final ante el Barça, llevándose un título que se resistía desde el año 93. El partido de la final, probablemente, fue el mejor partido que el Real Madrid ha disputado en muchos años, sin cometer ni un solo error y controlando en todo momento el juego. Sergio Llull se coronó como MVP, demostrando su crecimiento como jugador y su liderazgo dentro del equipo, al igual que Mirotic, que demostró una gran madurez a pesar de su juventud. Los blancos, eliminados de la Euroleague, se levantaban rápido gracias a este triunfo, que sin duda contentó a todos sus aficionados.

Por delante ya tan solo quedaba seguir peleando en la liga, y el Madrid continúo cosechando algunos resultados cómodos, pero las derrotas también llegaban, como la sufrida en Valencia, o las cosechadas en San Sebastián y Vitoria. A pesar de ello, el equipo de Laso ya estaba en una dinámica positiva, aferrándose poco a poco al segundo puesto y peleando por el primero. Durante algunas jornadas, los blancos lideraron la tabla clasificatoria, aunque finalmente fue el Barça quién logró hacerse con dicha posición. El Madrid finalizaba la temporada regular con 26 victorias y 8 derrotas, siendo el segundo clasificado de la liga, y con una buena nota de cara a las eliminatorias por el título.

Lo más destacado de la temporada:

-El estilo de Laso: El Madrid, tras mostrar una cara gris con Messina la temporada anterior, recupera la alegría en el juego, el desparpajo y la intensidad, logrando ser el equipo más ofensivo de la liga y haciendo de ello su seña de identidad.

-Mirotic: El joven talento madridista se ha destapado como líder del equipo, a pesar de su pequeño bajón en la recta final de la temporada. Su aportación al equipo es fundamental, y lo seguirá siendo durante el playoff.

-Llull y Rodríguez: Los bases han mostrado buena disposición y se han convertido en la sombra de Pablo Laso dentro de la pista.

-Un título conseguido: Sin duda, el ganar la Copa ha sido un suspiro de tranquilidad para el madridismo, que ya necesitaba volver a ver como los suyos levantaban un trofeo varios años después.

-Suárez, Felipe Reyes y Begic: Los tres jugadores han rendido por encima de lo esperado. Suárez ha ido recuperando su mejor versión, al igual que Reyes, que se ha convertido en un sexto hombre de lujo. Begic ha superado muchas expectativas logrando hacerse con el puesto de pívot titular.

Los puntos débiles:

-Defensa: El Madrid, siendo el equipo más anotador, también es un equipo que encaja muchos puntos. Uno de los problemas del equipo es el nivel defensivo, y para ganar la liga, los blancos deberán trabajar más en defensa.

-Velickovic: Una incógnita permanente. Jugador que no se sabe lo que va a hacer cuando juega, no tiene una posición definida y en ocasiones ni salta a la cancha.

-Tomic: Decepcionante temporada del croata. Se esperaba mucho más de él, y no ha logrado cumplir sus objetivos. Se ha estancado, perdiendo su puesto a favor de Begic. Aún está a tiempo de cambiar la dinámica y ser importante en los partidos de playoff.

En resumen, se puede decir que la temporada del Madrid es notable. Ahora veremos si ese notable aumenta o disminuye, dependiendo del papel que haga el equipo en el playoff por el título. El objetivo es ganar la liga, o como mínimo, jugar la gran final. Estaremos atentos al papel de los madridistas en lo que resta de temporada.

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