Quinteto históricos: Atlanta Hawks

Los Hawks son otra plantilla histórica, que está en la NBA desde el año 1946, cuando empezaron con el nombre de Tri-Cities Blackhawks, en Illinois, y han vivido varias mudanzas, estableciéndose finalmente en Atlanta, Georgia en el lejano 1968. 

Foto via Sentimiento AyN

Antes de esto, pasaron por Milwuakee, donde solo estuvieron 5 años y con malos récords de victorias-derrotas, pero gracias a esto pudieron seleccionar en el Draft al que, aún a día de hoy, es el mejor jugador de su larga historia: Bob Pettit. Después de que los aficionados se cansasen de perder, los Hawks eran trasladados a St. Louis, donde ganarían el único campeonato que tiene la franquicia en todos sus años de historia, liderados por el gran Pettit, en el año 58. Un año antes habían perdido las Finales contra los Celtics y volvieron a perderlas en el 60 y 61, para no volverlas a visitar nunca más hasta la fecha. La siguiente estrella que vieron los Hawks fue Dominique Wilkins, cuando ya estaban en Atlanta, y aunque eran eternos candidatos nunca consiguieron siquiera llegar a las Finales. Después de traspasar a Wilkins, en el 94, los Hawks llevan casi 20 años como un equipo interesante, con buenos jugadores y con opciones de hacer algo grande pero se han quedado con la etiqueta de 'eternas promesas', en parte debido al fracaso que supusieron los jugadores elegidos como referentes del proyecto, ya que ni Jason Terry, ni Glenn Robinson, ni posteriormente Joe Johnson -quién sí fue un referente ofensivo pero no el líder que debía guiar ese equipo con talento a cotas altas de la Liga- y Josh Smith (no incluyo a Al Horford porque creo no ha sido un fracaso si bien tampoco una estrella). La sequía ganadora debe terminar pronto, y aunque llevan un par de temporadas siendo uno de los mejores equipos de la Liga en Regular Season y una de las mayores amenazas de los Cavs Este, no pueden ser considerados todavía como un candidato firme al anillo. Veremos en el futuro si su buen juego puede traducirse por fin en aspiraciones legitimas al trono de la NBA.

BASE: PETE MARAVICH

He tenido un gran dilema en la posición de base (de hecho ha sido la única posición donde de verdad he dudado), pero finalmente me he decidido por Pete 'Pistol' Maravich, que, aunque solo pasó 4 temporadas en la ciudad de Georgia (donde promedió 24 puntos, 4.2 rebotes y 5.6 asistencias) tuvo un impacto tremendo, deleitando a la Liga entera con su enorme calidad y su estilo de juego vistoso e increíble. El motivo por el que estuvo poco en Atlanta, que lo drafteó como número 3 del Draft después de promediar 44 puntos por partido en la NCAA, fue por qué los Hawks ya tenían a Lou Hudson como 'guard' anotador y además 'Pistol' despertaba recelo entre algunos de sus compañeros, además de dar pases "demasiado complejos" para los otros mortales, y pese a mostrar su gran talento anotador, no pudo llevar al equipo lejos. Se ganó el apodo de 'Pistol' gracias a su velocidad frenética, a sus bonitos pases y a su destacado manejo de balón, al cual una leyenda como John Havlicek dedicó estas palabras: "El 'ball-handing' de Maravich ha sido el mejor que se ha visto en esta liga". Su paso por la ciudad no dejó indiferente a nadie, y creo que 'Pistol' Pete merecía más que nadie este privilegiado puesto, por delante de otros 'cracks' como Doc Rivers o Mookie Blaylock.

ESCOLTA: LOU HUDSON

Uno de los jugadores más infravalorados de la historia merecía estar sin duda en este quinteto. 11 años pasó en la franquicia, donde promedió 22 puntos y 4.9 rebotes y los Hawks le reconocieron su carrera retirándole el número. "Sweet Lou" no coincidió con Dominique Wilkins pero sí con Pete Maravich y con el pívot Walt Bellamy, formando uno de los equipos más talentosos de la NBA. Pero, como he explicado en lo de 'Pistol', la química del equipo no era buena, sobretodo debido al salario que cobraba un jugador joven como Maravich, mayor al de la mayoría de veteranos. Lou Hudson fue un ejemplo de esfuerzo y de fidelidad hacia un equipo, con su figura felina y con su gran facilidad para anotar. Un jugador conocido por su gran corazón y su solidaridad (actualmente está muy involucrado en obras benéficas), nunca tuvo ese "algo" especial que solo tienen unos pocos elegidos para guiar a los Hawks a llegar lejos. Sin duda una leyenda de los Hawks; para mi el tercer mejor jugador de la historia de esta franquicia por detrás de Pettit y Wilkins.

ALERO: DOMINIQUE WILKINS

Hall of Famer y uno de los mejores matadores de toda la historia, el alero fue el némesis de Michael Jordan durante los primeros años de 'Air', rivalizando tanto en la pista como en los concursos de Mates del All Star, aunque también tuvo grandes duelos con leyendas como Larry Bird. 'Nique' nació en París porque su padre formaba parte del ejercito americano y los Jazz le escogieron como número 3 en el Draft, siendo traspasado inmediatamente a los Hawks. En la capital de Georgia estuvo 12 temporadas promediando 26.4 puntos y atrapando 6.9 rebotes. Wilkins siempre lideró a los Hawks a ser uno de los mejores equipos del Este en la NBA, pero durante los Playoffs nunca consiguieron hacer nada grande, lo que ha impedido que sea considerado como una de esas grandes leyendas. No fue miembro del famoso 'Dream Team', pero sí ganó con USA el Mundial en 1994, cuando su carrera empezaba a bajar el nivel. Gran jugador con un físico pocas veces visto antes en la NBA, que creó una nueva forma de jugar al baloncesto y que dio muchas alegrías a los Hawks. Aunque, como ya hemos dicho, le faltó el anillo y eso marca la diferencia.

ALA-PIVOT: BOB PETTIT

El mejor jugador de la historia de esta plantilla y una de las primeras estrellas de la NBA. Pettit dominó los tableros de la NBA durante más de una década, jugando todas sus 11 temporadas en los Hawks (primero en Milwuakee y luego en Saint Louis) y promediando los monstruosos números de 26.4 puntos y 16.2 rebotes por partido. Además le dio a la franquicia el único anillo que han ganado hasta ahora. Fue el primer MVP de la historia (ganó 3 veces este galardón) fue cada una de sus temporadas All Star, estuvo 10 veces en el quinteto ideal de la Liga, fue 4 veces MVP del All Star y ganó el premio de Rookie del año, entre otras cosas. Un jugador que sin ser muy alto, gozaba de una habilidad fuera de lo común para jugar debajo de los tableros, teniendo uno de los repertorios ofensivos más letales de la historia. El jugador nacido en Louisiana contribuyó muchísimo a que la NBA creciese y sin duda está entre los más grandes que jamás han practicado este deporte.

PIVOT: ZELMO BEATY

Injustamente olvidado, 'Big Z' fue un 'center' que con solo 2.06m fue capaz de plantar cara a leyendas como Wilt Chamberlain o Willis Reed. Pasó los 7 primeros años de su carrera en los Hawks, viviendo la mudanza de Saint Louis a Atlanta. La posición de 5 es la más floja de los Hawks, siendo solo Walt Bellamy y Al Horford los único de poder disputarle este puesto a Beaty. En los años que jugó en los Hawks estuvo casi todas temporadas con más de 15 puntos y 10 rebotes por partido, promediando 17.4 puntos y 11.2 rebotes. Después de 6 años en Saint Louis y 1 en Atlanta, Beaty decidió abandonar la NBA e ir a la atractiva ABA, donde ganó un título con los Utah Stars, premio que nunca pudo conseguir en la NBA. Pasó su último año como profesional de nuevo en la NBA, pero no con su club de toda la vida, sino con los Lakers, aunque su aportación fue mucho menor y decidió retirarse.

SEXTO HOMBRE: DOC RIVERS

Si Maravich representa impacto y calidad, Rivers representa un base chapado a la antigua, que pasó 8 años en los Hawks y promedió 12.9 puntos y 6.8 asistencias en la capital de Georgia. Compartió equipo con el gran Dominique Wilkins pero, como ya he dicho, no lograron nunca llegar lejos del todo. Rivers siempre fue un jugador que estuvo a la sombra de 'Nique', no una estrella o un gran anotador y es por eso que pocos le valoran como jugador (como sí lo hace casi todo el mundo como entrenador, de manera totalmente merecida) pero he decidido ponerle como Sexto Hombre en estos Hawks, franquicia con mucha historia. Fue 'All Star' un año, y destaca por ser un base inteligente que perdía pocos balones y que recuperaba muchos, siendo un sólido defensor y un notable triplista.

MENCIONES ESPECIALES PARA...

MOOKIE BLAYLOCK: Otro candidato a ser sexto hombre, pero me decidí por Rivers. Es el segundo máximo asistente de la historia Hawk, solo superado por el propio Doc y el máximo ladrón. Excelente defensor, fue nombrado 2 veces en el mejor quinteto defensivo y fue dos temporadas el máximo ladrón de la NBA. Vivió gran parte de su carrera en los Hawks (7 temporadas), donde promedió 14.9 puntos y 7.3 asistencias por partido. Además, fue un gran triplista, consiguiendo en la 95/96 231 metidos, séptima mejor marca de la historia. Además, es el máximo triplista de la historia de los Hawks. Es miembro del grupo de música 'Pearl Jam'.

JOE JOHNSON: 6º máximo anotador de la historia de la franquicia y segundo mayor triplista, Johnson nunca pudo liderar a los Hawks al nivel que se esperaba de él y su equipo, pero sin duda fue un gran anotador y la mayor figura del equipo en este siglo XXI. Pasó 7 temporadas en Atlanta, promediando en ellas una media de 20.9 puntos, 5.2 rebotes y 4.2 asistencias por partido, participando en 6 'All Stars' representando al equipo de Georgia. Con su gran contrato nunca terminó de convencer, y es cuestionable su presencia aquí.

JOHN DREW: Jugador que vio ensombrecida su gran carrera con un final oscuro: la adicción a la cocaína. Después de su traspaso a los Jazz, se enganchó y en el 86 fue suspendido definitivamente de la NBA, siendo el primer jugador de la historia en ser expulsado para siempre. Pero antes de esta tragedia, Drew tuvo tiempo para demostrar su enorme talento para jugar al baloncesto, ya desde su temporada Rookie. En los Hawks jugó 8 años, promediando los increíbles números de 21.2 puntos y 7.5 rebotes por partido, siendo a día de hoy el quinto mayor anotador de la historia del equipo. Como récord negativo, es junto a Jason Kidd, el jugador que más balones ha perdido en un solo partido, con 14. Los Hawks le enviaron a Utah en el traspaso de Wilkins, lo que resultó ser una gran decisión...