El escándalo más importante del final de temporada en la NBA fue el de las polémicas declaraciones de Donald Sterling que acabaron con una dura sanción de por vida por parte de la NBA. Tras el escándalo, Donald decidió vender la franquicia pero al estar sancionado relegó la responsabilidad en su esposa Shelly. Ahora, la esposa ha tenido que declarar ante el juez por este escándalo para explicarlo todo.
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| Foto: Eldiario.com |
Shelly Sterling, esposa de Donald, regresó el pasado jueves al estrado para explicar que ella tenía ahora la potestad de los Clippers después de que su marido la animase a vender la franquicia. Después de que la liga prohibiese cualquier movimiento a Donald, Shelly decidió buscar compradores para poder vender la franquicia, y los encontró. El ex propietario de Microsoft ofreció 2 millones de dólares por la franquicia. En un principio, el marido de Shelly se alegró mucho por la venta pero pasado unos días su carácter cambió.
El marido le dijo que no iba a vender la franquicia pero Shelly hizo valer el acuerdo con el propietario de Microsoft y también que los jugadores y patrocinadores iban a hacer boicot si Donald no vendía el equipo.
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