El Gipuzkoa Basket logra su tercera victoria consecutiva ante un combativo Iberoestar Tenerife que no le puso las cosas fáciles al conjunto de Sito Alonso. Los guipuzcoanos vuelven a mirar las zonas altas de la clasificación mientras que los tinerfeños se colocan en tierra de nadie.
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Primer cuarto
El partido comenzaba con poca anotación exterior y las defensas haciéndose notar. Pero minutos después el acierto del Gipuzkoa Basket comenzaba a carburar y lograba marcharse en el marcador a falta de 5 minutos del término del primer cuarto (15-7 min 5).
Ramsdell, Neto y la superioridad de Doblas en el poste bajo hacían que Alejandro Martínez pidiese un tiempo muerto. Aun así el Gipuzkoa Basket tenía mucha facilidad para anotar. El parcial del primer cuarto demoledor a favor de los de Sito Alonso, 26-9.
Segundo cuarto
El segundo cuarto comenzó como todos esperábamos, con los dos equipos defendiendo y atacando como mejor saben. El factor Mikel Motos fue muy importante para imprimir una mayor intensidad en la defensa sobre Nico Richotti, aunque este lograba canastas. El Iberostar Tenerife se acercaba a 10 puntos en el marcador. De los 15 puntos en los primeros 7 minutos de cuarto, 11 eran del jugador argentino. Parcial de 11-23 en el segundo cuarto a favor de los isleños.
Al término de la primera parte, 3 puntos de diferencia 37-34.
Tercer cuarto
Gipuzkoa Basket retomaba su identidad y fortaleza en defensa y volvía a tener buenas situaciones de tiro que volvían a darle cierta ventaja en el marcador en la reanudación. (45-36 min 25).
La irrupción de Huscik tanto en defensa como en ataque. Abría cancha y mostraba intensidad en todas las facetas de juego. Los jóvenes del Gipuzkoa Basket se hacían mayores (49-44 min 29). EL Gipuzkoa Basket quería más, pero los tinerfeños no se rendían una vez más con Richotti como buque insignia. Al término del tercer cuarto, el acierto exterior de los de Alejandro Martínez igualaban el marcador, 51-49.
Cuarto cuarto
La palabra que describe a este cuarto es coraje. Coraje de los dos equipos en ataque, coraje de los dos equipos en defensa, pero sobretodo, en las ganas de obtener la victoria. A falta de 5 minutos de que el partido terminase los puntos y las defensas en los miss matches de Charles Ramsdell daban una ligera ventaja (56-53).
Los canarios igualaban, no obstante, la pareja Doblas-Javi Salgado querían lograr la victoria, tenían hambre y lo demostraban en cada jugada. La igualdad era máxima. Un triple de Javi Salgado desde su casa ponía el 63-58 en el marcador a falta de 2 minutos para el colofón del encuentro. Dos tapones de Ramsdell y una pérdida importante de Luke Sikma hacía presagiar que la victoria se quedaba en San Sebastíán. Y así fue gracias a un tiro de dos de Jason Robinson que se quitaba la espina del partido de ida.
Un triple exquisito de Richotti y una pérdida de Jon Cortaberría tensionaban un poquito más el partido si cabe, pero al final los tiros libres decantaron el partido a favor de locales.
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