Es evidente que, llegado este momento de la temporada, cualquier rival es complicado. Pero si puedes evitar al campeón de Europa, pues mejor. Seguro que eso piensan los jugadores y el cuerpo técnico del Real Madrid, que de ganar hoy al Zalgiris, se las verán con el Panathinaikos en el cruce de cuartos de final de la Euroleague.
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| Foto: Euroleague |
La victoria del Olympiacos ante el Panathinaikos, con un Spanoulis decisivo, ha dado el tercer puesto de su grupo al vigente campeón de la competición. El Panathinaikos, por su parte y contra pronóstico, se mete en las eliminatorias con un balance de 7-7 dejando fuera al gran favorito como era el Fenerbahce Ulker, que ha vuelto a fracasar un año más tras hacer una inversión multimillonaria.
Es por eso que, llegados a este punto, el Real Madrid tiene todas las cartas sobre la mesa. Los de Pablo Laso no quieren ver al Olympiacos ni en pintura, ya que recordemos, los griegos derrotaron al conjunto merengue en la última final europea en un partido que se le atragantó en la segunda mitad al equipo merengue. Ganando en Kaunas, el Madrid será primero de grupo y evitará al Olympiacos en el cruce, y además evitará por consiguiente enfrentarse al Barcelona en una hipotética semifinal de Final Four.
Esta tarde en Lituania -18:45, Canal+ Deportes-, los blancos tienen la oportunidad de sentenciar el grupo y enviar al CSKA a la eliminatoria que nadie desea, ante los campeones que, aunque tengan factor cancha en contra, siempre son un contrincante peligroso. Bien es cierto que el Panathinaikos no es, ni mucho menos, una opción sencilla, pero puestos a preferir...
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