Demasiado Kirilenko para esta Euroleague (77-66)

Foto: Euroleague/Getty

Unicaja pierde, pero dando la cara más de lo esperado, en el siempre complicado campo del CSKA de Moscú de Kirilenko, Teodosic, Krstic y mucho más, y es que los rusos tienen un equipazo, muy completo en defensa y más que efectivo en ataque. Unicaja aguantó muy bien los dos primeros cuartos, poniendo en serios apuros a los locales, pero el tercero fue muy decisivo para la victoria rusa, ya que lograron una ventaja de veinte puntos.

El último cuarto volvería a ser de Unicaja, que puso de nuevo contra las cuerdas a los rusos, bajando incluso de los diez de diferencia, pero no pudo ser. Si hay que destacar a algún jugador en el conjunto malagueño sería a Rowland, o incluso, Berni, que supieron manejar muy bien el encuentro cuando disfrutaron de ventaja en el marcador. En los rusos, destacar como no, la actuación de sus hombres referencia, Kirilenko y Teodosic, con más de 15 puntos cada uno, y que se encargaron de matar el partido cuando fue necesario.

En los primeros minutos, Unicaja tenía controlado el partido por así decirlo, ya que Kirilenko no aparecía y Teodosic lo hacía lo justo. El cuarto se desarrollaba con ventajas mínimas para ambos equipos, sin que ninguno de los dos llegara a escaparse en el luminoso. Lo sorprendente fue que al final del primer periodo, fuera Unicaja quien tuviera la ventaja (12-14).

El segundo cuarto tendría exactamente el mismo guión que el primero. La máxima igualdad reinaba en el ambiente, pero ya empezaba a verse al NBA Kirilenko y al que es, posiblemente, el mejor base de Europa, Teodosic. La igual llegaría hasta el último minuto del cuarto, ya que una falta antideportiva de Freeland permitió al CSKA escaparse de un poco en el marcador, para llegar al descanso con una pequeña ventaja de cinco (34-29).

La segunda mitad del encuentro no comenzaba nada bien para los malagueños, ya que los rusos salieron enchufados y se colocaron con ventaja de doce en apenas dos minutos. Unicaja se vino abajo en el encuentro cuando Chus Mateo decidió cambiar la defensa zonal que tan buen resultado le dio en la primera mitad, por una defensa hombre a hombre que era más un coladero que otra cosa. El partido se termino para Unicaja cuando los dos hombres clave del CSKA decidieron ponerse enserio y pusieron el partido en el guión que se esperaba de él. A los últimos minutos se llegaba con un marcador más que cómodo para los intereses rusos (62-41).

Los últimos minutos solo sirvieron para que el CSKA diera minutos a los menos habituales y para que Unicaja intentara maquillar un poco el resultado, que se entreveía muy abultado. El partido no tenía ya gran interés, bien es verdad que Unicaja recortaba bastante la ventaja respecto al cuarto anterior, pero no serviría de mucho de cara a conseguir la victoria, porque cada vez que se apretaba el marcador, los rusos ponían de nuevo un poco de tierra de por medio. No obstante Unicaja decidió dar guerra hasta el final, y llegaron a colocarse con tan solo ocho puntos de diferencia. Al final, derrota malaguista, como todos esperaban (77-66).